Reforma integral para unir dos viviendas en uno de los edificios más emblemáticos de nuestra ciudad. Desde el principio lo tuvimos claro, nuestro objetivo sería cumplir con las necesidades de nuestro cliente, pero esta vez, realzando además el carácter histórico del edificio, trasladándolo al interior de la vivienda. 

Ideamos una nueva distribución, creando espacios muy amplios y luminosos, dando protagonismo a los grandes ventanales y a las espectaculares vistas al río.  

La carpintería de madera realizada en nogal americano recorre toda la vivienda y es uno de los puntos clave de la intervención, creando un elegante contraste con las paredes blancas con molduras y la tarima de madera en Punta Hungría.

Diseñamos además una gran chimenea en el salón, como la gran protagonista del espacio. Para el baño principal, diseñamos un mueble con doble seno integrado, todo realizado con material de gran formato efecto calacatta, logrando un ambiente elegante y atemporal.  

Toda la vivienda está ejecutada con materiales de primera calidad. La equipamos además con un sistema domótico que controla la instalación de calefacción por suelo radiante, la climatización, además del control de la cuidada iluminación, entre otras cosas.